La final de la Copa Chile MTS en Temuco se constituyó en una verdadera fiesta para los hinchas de La Araucanía.

En tanto, el viaje de las delegaciones de Universidad de Chile y Católica se produjo en el mismo vuelo charter, donde se encontraron los jugadores de ambos planteles y, aparte delos saludos de rigor, se cruzó más de alguna broma.

Azules y cruzados se instalaron en el mismo sector de la aeroneave, separados por un pasillo y por su propio concentración previa a la final. El buen ambiente y la camaradería tradicional entre los futbolistas se reflejó, por ejemplo, en el diálogo distendido entre el zaguero pepe Rojas y el goleador Carlos Buenos.

Al fin, la gran final de la Copa se inició en Pudahuel y prosiguió a bordo de un avión. En la cancha, más tarde, ya volverían a ser rivales...