Durante la mañana, el lugar de entrenamiento fue la terraza y el gimnasio del hotel de concentración. Al principio todos los jugadores realizaron trabajos de activación con elementos asistidos.

Después, los que tuvieron más minutos reforzaron la zona media e hicieron ejercicios aérobicos a baja intensidad e intermitentes. En tanto, los futbolistas que no vieron acción se ocuparon de activar el tren superior con cargas aérobicas intermitentes.

Ya por la tarde la práctica se trasladó al estadio da Serrinha, mismo recinto donde se jugó ayer y que albergará dos partidos (Francia y Haití) de La Roja Sub 17. Allí, el directo técnico Cristian Leiva y su ayudante Fernando Marinelli trabajaron las últimas tácticas de cara al segundo amistoso con Brasil.

Estos encuentros ante la selección local se enmarcan en el proceso de preparación para la Copa Mundial Sub 17 de la FIFA - Brasil 2019.

Por Camilo Benavides A.
Fotografías Carlos Vera M.
Enviados especiales a Goiânia, Brasil